martes, 28 de febrero de 2012

Fin de semana "en blanco"

Aprovechando un martes festivo en Gijón y con el permiso de mi familia (hermana incluido) me escape con mi hermano y cuñado unos días a la nieve.
En un principio salvando unos pequeños inconvenientes del alojamiento todo marchaba bien. Hasta el tiempo nos acompañaba y las nubes nos abrían paso.


El viaje perfecto, sin prisa pero sin pausa y observando lo poco que se puede ver una vez echada la noche.



Llegamos de madrugada y un compañero de nuestro anfitrión, que por un pequeño motivo de cinco meses no se encontraría en la casa hasta el domingo, nos espero para entregarnos las llaves,  Diego, una persona muy amable aunque no podía ser de otra forma, es Asturiano, de Grao.

Hacía un frío bárbaro pero en la casa de "Luigi" no había problema.


Una casa muy acogedora y romántica pero claro, tres hombres en ella, no era para pensar en esos menesteres.

Al día siguiente todo es perfecto, la mañana es estupenda, el pueblo, Bossóst, una maravilla, pero cuando tenemos todo listo para subir a las pistas........


Error de cordinación... ooooooooooohhhhhhhhhhhhhhhhhh.


Solución, viaje a LLeida a reparar el roto. Dos horas de viaje ida y dos de vuelta y eso dejando el coche en el taller para recoger el lunes o martes. Además con la luneta rota y ese frío.


Bueno un pequeño incidente que nos cuesta un sábado soleado, unos cuantos euros de alquiler de coche con su respectivo gasoil y un palizón para recogerlo. 









Pero hay que ver el lado bueno, si no hubiésemos ido a Lleida no hubiéramos visto este embalse congelado; es que quién no se anima es porque no quiere.

En los siguientes días todo mejoró, lo pasamos genial ,nos hartamos de nieve por todos los sitios y el año que viene si se puede, pues repetimos. Eso si después de volver a por el coche "a todo trapo" porque quisimos aprovechar el tiempo al máximo, la luneta trasera no llegaba hasta el miércoles, vamos ....que nos partimos de la risa cuando nos enteramos.

El principiante.

El intermedio.

El profesional.




Gracias a Luigi por ofrecernos gentilmente su casa.








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